Inicio - Cirugía estética corporal - Lifting de brazos

Lifting de brazos

Recupera la firmeza y juventud de tus brazos.

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Lifting de brazos

Recupera la firmeza y juventud de tus brazos.

El lifting de brazos es un procedimiento quirúrgico que tiene como objetivo mejorar la apariencia de los brazos, eliminando el exceso de piel flácida y tonificando la zona para devolverles un aspecto más firme y juvenil. Este tratamiento es ideal para personas que han perdido peso de manera significativa o para quienes experimentan flacidez en los brazos debido al envejecimiento. El lifting de brazos también es conocido como braquioplastia y se enfoca en conseguir un contorno más armonioso y estéticamente agradable.

¿Qué es un lifting de brazos?

El lifting de brazos o braquioplastia es una cirugía estética que elimina la piel flácida y el exceso de grasa de la parte superior de los brazos. Este procedimiento está especialmente indicado para personas que, tras una pérdida de peso considerable o el paso del tiempo, presentan piel sobrante y flácida que afecta la firmeza y el contorno de sus brazos. El lifting de brazos puede mejorar significativamente la estética de la zona, logrando un perfil más tonificado y proporcionado.

¿Quién es un buen candidato para un lifting de brazos?

El lifting de brazos es adecuado para aquellos que tienen exceso de piel en la parte superior de los brazos, especialmente después de una pérdida significativa de peso o el envejecimiento. Los buenos candidatos para este procedimiento son personas que tienen una salud general aceptable, están cerca de su peso ideal y desean mejorar la forma y firmeza de sus brazos. Además, es fundamental tener expectativas realistas sobre los resultados.

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    Motivo de la consulta

    ¿En qué consiste el lifting de brazos?

    El lifting de brazos es un procedimiento quirúrgico en el que se elimina el exceso de piel y grasa en los brazos para devolverles una apariencia más firme y tonificada. Durante la cirugía, el cirujano realiza una incisión en la parte interna o posterior del brazo, dependiendo de la cantidad de piel a eliminar y la ubicación de la flacidez.

    El procedimiento puede implicar:

    En algunos casos, el lifting de brazos se puede combinar con liposucción para eliminar la grasa adicional, lo que ayuda a esculpir y tonificar aún más la zona.

    Técnicas quirúrgicas de lifting de brazos

    Existen diferentes enfoques quirúrgicos para realizar el lifting de brazos según las necesidades del paciente y la cantidad de piel flácida a eliminar:

    Braquioplastia clásica

    Consiste en una incisión en la parte interna del brazo, desde la axila hasta el codo, para eliminar el exceso de piel y grasa.

    Braquioplastia con liposucción

    En algunos casos, se combina la liposucción con el lifting de brazos para eliminar la grasa de la zona y mejorar aún más el contorno.

    Técnica de incisiones mínimas

    En casos menos complejos, se pueden realizar incisiones más pequeñas o más discretas para mejorar la apariencia de los brazos sin una cirugía tan invasiva.

    Postoperatorio y recuperación

    La recuperación del lifting de brazos puede variar según el tipo de procedimiento realizado, pero generalmente toma entre 2 y 4 semanas para la mayoría de los pacientes. Durante el postoperatorio, es común experimentar dolor moderado, hinchazón y moretones, los cuales se pueden manejar con medicamentos recetados.
    Es importante seguir las recomendaciones del cirujano, que suelen incluir:

    Preguntas frecuentes sobre el lifting de brazos

    ¿Cuánto dura la cirugía de lifting de brazos?

    La cirugía de lifting de brazos suele durar entre 2 y 3 horas, dependiendo de la cantidad de piel a eliminar y las técnicas utilizadas.

    El dolor durante la cirugía es mínimo debido a la anestesia general. Después de la operación, es posible que experimentes dolor moderado, que puede ser controlado con analgésicos recetados por el cirujano.

    Los resultados iniciales son visibles casi de inmediato, pero los resultados finales se aprecian después de 2 a 3 meses, cuando la inflamación ha disminuido y la piel se ha adaptado a su nueva forma.

    Los riesgos incluyen infecciones, sangrados y cicatrices visibles. Sin embargo, estos riesgos son bajos cuando la cirugía es realizada por un cirujano experimentado y certificado.