La liposucción es una de las intervenciones más frecuentes en cirugía estética y una de las más efectivas para eliminar depósitos de grasa localizada que no desaparecen con dieta, ni con ejercicio. Hoy ya contamos con técnicas que nos ayudan a ser más precisos en la zona a tratar y menos invasivos y con una mayor naturalidad en el resultado.
En este artículo te explicamos en qué consiste una liposucción, qué zonas podemos tratar, cuándo está indicada y qué resultados puedes esperar.
¿Qué es una liposucción?
La liposucción es una intervención que permite extraer grasa localizada mediante la aspiración con unas cánulas finas. No está pensada como un tratamiento para adelgazar, sino para tratar y remodelar zonas en las que se acumula grasa rebelde.
Las zonas más habituales donde se realiza la liposucción son:

- Abdomen
- Caderas y flancos
- Muslos (cara interna y externa)
- Brazos
- Cuello y papada
- Rodillas
Liposucción abdominal: ¿cuándo se recomienda?
La liposucción abdominal es una de las más solicitadas, ya que la zona del abdomen acumula fácilmente grasa, incluso en personas delgadas.
Está especialmente indicada cuando:
- Hay grasa localizada resistente a la dieta y al ejercicio físico.
- La piel tiene buena elasticidad y puede retraerse bien tras la intervención.
- No hay una diástasis abdominal (en ese caso puede recomendarse una abdominoplastia)
En muchos casos, la liposucción abdominal se combina con otras zonas para conseguir una silueta más armónica.
¿Cómo se realiza una liposucción?
El procedimiento puede realizarse con anestesia local con sedación o anestesia general, dependiendo del volumen a tratar.
Los pasos son:
- Marcaje previo de las zonas a tratar
- Infiltración de suero con anestesia y vasoconstrictores
- Aspiración de la grasa mediante cánulas delgadas conectadas a un sistema de vacío
- Cierre con puntos muy pequeños
La duración de la intervención varía entre 1 y 3 horas. Es habitual llevar una faja de compresión durante varias semanas tras la cirugía.
Tipos de liposucción
Existen diferentes técnicas que mejoran el resultado y reducen el tiempo de recuperación:
- Liposucción tradicional: La más usada. Segura y efectiva.
- Lipoláser: Combina láser que licua la grasa y estimula la retracción de la piel.
- VASER: Usa ultrasonidos para emulsionar la grasa y definir zonas con mayor precisión.
- Lipoescultura 3D o HD: Técnica avanzada para definir musculatura abdominal, glúteos, etc.
Resultados y recuperación
El resultado definitivo de una liposucción se aprecia entre los 3 y 6 meses después, cuando se desinflama la zona y la piel se adapta al nuevo contorno.
Beneficios:
- Remodelación de la silueta
- Reducción de volumen en zonas localizadas
- Mayor definición corporal
- Mejora de la autoestima y la imagen personal
La recuperación suele permitir volver a la rutina laboral en 4-7 días, dependiendo del paciente.
¿Quién es candidato ideal para una liposucción?
- Personas con grasa localizada y peso estable
- Piel con buena elasticidad
- Buen estado de salud general
- Expectativas realistas sobre los resultados
La valoración médica personalizada es clave para definir la mejor estrategia y técnica.
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